Iglesia de
Santa María La Real
Detalles sobre la iglesia
En la época altomedieval, la iglesia de Santa María la Real fue sede de un efímero obispado, razón por la cual se denomina también al templo Colegiata.
La iglesia primitiva de principios del siglo XIII, tardorrománica, fue sustituida a mediados del siglo XIII, por el actual inmueble gótico. De estilo tardorrománico restan sólo elementos escultóricos en el claustro y dos portadas, la occidental, con arquivoltas apuntadas y capiteles con arpías y otra tapiada, visible desde el claustro.
La planta del templo resulta extraña pues se compone de una gran nave central y dos laterales que fueron destruidas casi por completo durante la guerra de la Independencia, siendo separadas del resto de la iglesia por un muro. La cabecera es de grandes dimensiones y el crucero está compuesto por dos naves y posee cinco capillas. La torre se levanta en la cabecera de la nave sur. Del siglo XV es el claustro, situado en el lado norte, probablemente obra de Juan de Colonia. La magnífica puerta del brazo sur del crucero destaca por su semejanza con la puerta del Sarmental de la Catedral de Burgos. La sacristía, en la cabecera de la iglesia, es del siglo XVI.
En el interior, destaca el retablo mayor neoclásico y un retablo plateresco de Santiago, en la cabecera. Sobresalen también dos pilas bautismales, una románica muy sencilla y la otra renacentista, profusamente decorada, un púlpito de piedra y restos de un retablo romanista.
